Hoy en el día del Padre propongo reflexionar un poco sobre esta persona.
En primer lugar fue o es aquella persona que permitió que llegáramos al mundo, junto a otra persona que también ocupa un lugar muy significativo, brindo su cariño, tal vez a su manera, pero dejando un marca importante. En algunos casos, su presencia no fue suficiente, en otras pudo resultar asfixiante pero, a su manera y sin manual de instrucciones, está o estuvo presente.
En el momento actual de la historia en que nos toca vivir se puede observar y se escucha muy frecuentemente que los padres, y es en general, no están cumpliendo la función que antiguamente cumplían, aquella de poner limites a nuestros caprichos o nuestras malas acciones, hoy nos encontramos en un vínculo Padre- Hijo donde la frontera se pierde, la autoridad no se encuentra bien marcada y, es allí donde se producen los excesos. Los niños de hoy podría decirse que no encuentra la contención necesaria ni la transmisión de valores, razón por la cual leemos, escuchamos y vemos noticias sobre niños que pegan a sus docentes, niños que pelean, llegando a punto de matar a su compañero de juego, etc…
Por lo tanto, sería interesante como hijos pensemos qué nos ha dado nuestro Padre, pero también como Padre qué he hecho por mi/ mis hijo/s y qué le/ s he transmitido.
Por último, a modo de regalo y continuando con la reflexión les dejo una canción de Silvina Garré…
